Hoy el escenario político en el que se desarrolla nuestra paritaria sectorial se halla bastante sacudido. Las promesas que ha hecho Martinez estaban basadas en acuerdos verbales con una ministra que, literalmente, se llevó la bolsa y salió silbando bajito. El nuevo ministro, Peyrano, ex secretario de industria, no tiene un gran trato con Martinez que en lugar de hablar con el cualquier tema, siempre privilegió el trato directo con Michelli, puenteando a los mandos medios de economía.
El puesto de Presidente del INTI va a estar en discusión los proximos días, y yo veo cuatro escenarios posibles:
Uno, Martinez sigue haciendo prolijamente los deberes como hasta ahora, no pide la partida del 16,5% ni mayor presupuesto, nosotros nos quedamos en el molde, el escalafón se dilata hasta que asuma el nuevo presidente. Mal
Dos, el nuevo ministro saca a Martinez, el nuevo presidente desconoce todo lo que se habló en las mesas paritarias, nosotros nos quedamos en el molde, el escalafón se dilata hasta que asuma el nuevo presidente. Mal
Tres, los trabajadores metemos presión, salimos a la calle, Martinez para conservar su puesto y tranquilizar las aguas hace concesiones, comedor, más incentivos, pide que se aceleren las paritarias. Mejor
Cuatro, ante la presión de los trabajadores el nuevo ministro saca a Martinez, y el nuevo presidente se encuentra con un INTI convulsionado, hace concesiones para aquietar las aguas y comenzar la nueva gestión. Mejor
No vamos a conseguir nada sentados en los laboratorios ni oficinas. Es el momento, más que núnca de meter presión. A río revuelto ganancia de pescadores.
Pese a las desconfianza que muchos compañeros tienen en el sindicalismo, y en la Junta Interna de ATE en particular, Pancho, Fabián, Magallanes o yo, y a las diferencias que podamos tener hoy es el momento de ir a la asamblea, de participar. Porque es sobretodo en estos momentos de crisis por arriba que los trabajadores podemos arrancar conquistas y obtener aumentos.
Yo sé que desde ATE no se le ha dado continiudad a la lucha y se ha confiado, exesivamante a mi juicio, en las promesas de Martinez. Por eso es que hay que ir, para organizarce, más allá de los sindicatos, es viendonos las caras que podemos empezar a confiar en nuestras propias fuerzas. A la última asamblea fueron, contando a la Interna, cuarenta personas, eso demoralizó a todos los compañeros y le dió aire a Martinez para retirar el paliativo que venía dando.
Puede ser que los sindicatos que hoy tenemos desmotiven la participación y generen rechazo a las asambleas. Pero también es cierto que la baja participación y el no concurrir a las asambleas, el no afiliarse, deja en manos de los mismos de siempre el poder de decisión y las herramientas que son propias de los trabajadores.
Yo creo firmemente en el cambio. Pero este no se produce solo. Seámos artifices de nuestro propio destino.
Este martes vayamos a la asamblea, y propongamos medidas que incluyan a todos los trabajadores del INTI, demosles continuidad en un plan de lucha hasta lograr un escalafonamiento como la gente. no hay que bajar los brazos sólo porque es dificil. Si dejamos que lo haga otro no va a ser en nuestro beneficio.
