lunes, 6 de junio de 2011

Unidad y lucha: sobre las elecciones en ATE Capital

El último plenario convocado por la directiva de ATE, el pasado lunes 30 de mayo, puso de manifiesto que tipo de herramienta gremial necesitamos los tra­bajadores: un gremio al servicio de las necesidades del movimiento obrero, organizando los sectores y compañeros, unificando las luchas centrales que for­man el ABC de las peleas sindicales, es decir, salir a la calle a luchar por salarios dignos y estabilidad labo­ral. Salarios que rompan con la barrera que imponen los gobernantes de turno y sus laderos y la estabilidad que termine con todos los métodos de precarización en el estado: el pase a planta permanente de todos los compañeros contratados. Estos dos puntos básicos unifican persé a to­dos los organismos del estado, munici­pales y distritales, pues es el mismísimo estado el que tiene mayor cantidad de “trabajadores de segunda” y los salarios más bajos, históricamente.

El doble discurso de los Kirchner, con Tomada a la cabeza, ya no tiene cabida en los trabajadores y, por otra parte, los negociados y los parates de la burocra­cia sindical cuando de uni­ficar se trata, tienen que en­contrar un freno, organización y propuestas de fondo.
En el plenario se reclamó a la di­rectiva de ATE que empiece a pensar más en los trabajadores y menos en las elec­ciones. Se exige desde todas las reparticiones que se unifique y organice un gran plan de lucha nacional y/o provinciales de ATE para liquidar, de una vez por to­das, con las imposiciones salariales y la precarización que el gobierno y el gremio pro-patronal de UPCN nos imponen año tras año.

Ya existen pequeños embriones de organización por fuera de la dirección de ATE. Los compañeros de De­sarrollo Social, SENASA, INTI, Min. de Trabajo y otros espacios hemos empezado a confluir en la pelea. Si la directiva no se pone a la cabeza de esta deman­da, somos los delegados de las diversas juntas inter­nas con el activismo los que deberemos movilizarnos para sacar al gremio de la parálisis y la entrega. Asi­mismo, hay que descartar todo personalismo e impo­siciones sectarias para confluir con más compañeros/as y desbordar cada marcha, acto, acampe o acción que se impulse y concrete.

Sobre las elecciones en ATE

Ha pasado prácticamente un año desde las eleccio­nes de la CTA. Compañeros de la German Abdala (Verdes), la CCC y el MST, logramos derrotar las maniobras de Yasky y el gobierno nacional de liquidar la construcción y herramienta gremial, para así someter a los trabaja­dores en los antojos de la política oficial. Confor­mar aquella Lista 1 para que la central no sea cooptada fue un triunfo, pero, lamentablemente, las prácticas clientelares y la parálisis que la vieja burocracia venia imponiendo siguió primando pese a todos los esfuerzos. Plenarios de de­legados exigiendo que se ponga en movimiento la central, debates para que ATE salga a la calle a luchar, un congreso nacional de la CTA con invitados de piedra como Alfonsín y un plan de lucha mediocre como los que se venían reali­zando con la vieja conducción, nos hacen repensar las alianzas y estrategias.

Todos estos condimentos nos encuentran con el gre­mio en una interna verde de las viejas horas, mostran­do que mucho de lo que se dijo y debatió fue una gran montada de escena. Los kirchneristas y oportunistas intentan hacer un armado para disputar, pero también se meten en la rosca verde de Micheli y componen la futura lista.

Por otra parte, frente a esta políticas y prácticas bu­rocráticas, se conforma un frente supuestamente uni­tario para poner en debate que tipo de gremio quere­mos y necesitamos. O seguimos abonando a las viejas formas y prácticas, o nos jugamos por transformar nuestro gremio con representación de las minorías, democratizando los espacios y, por sobre todo, uni­ficando las luchas comunes de todos los trabajadores a través de los debates necesarios y con la práctica democrática de convocar a plenarios de base y delega­dos en todo el país.

Hoy los verdes no están demostrando disposición de cambio y los puntos en común que nos unifica­ron en las elecciones de la CTA, se demuestran in­suficientes. La política que puede encarar una lista encabezada por el sector de J.L.Matassa, que nunca impulso la organización en masa de cuerpos de de­legados, es decir, organizar sectores aunque no es­tuvieran afiliados a ATE. Que en CNEA tolera las políticas “K” conciliadoras de la Asociación de Pro­fesionales y la convivencia con un colaborador de la dictadura, a pesar de la confesión de este mismo, siendo delegado, durante mucho tiempo y conocien­do esta situación.

Por otro lado en la Bermellón hay varios de los sec­tores con los que nos encontramos día a día en las lu­chas, sectores muchas veces chicos pero muy activos o sectores nuevos y dinámicos como los compañeros de Ministerio de Trabajo. Nosotros somos críticos de esa construcción porque los compañeros, si bien sue­len ser aguerridos luchadores, cuando llega la hora de coordinar o plantear alternativas privilegian las políticas testimoniales. El purismo ideológico y po­lítico antes que herramientas transicionales que per­mitan desplazar a los burócratas de sus sillones. Hay un vicio personalista que habría que desterrar, a la par de debatir las políticas que se levantan, pues algunos compañeros, creen que la disputa gremial no tiene li­gazón con el análisis y elaboración de la política en términos generales.

Por otra parte, el kirchnerismo no es alternativa a estos y, como en las colectoras que abonan a nivel nacional a CFK, es decir, los Saadi, los Menem, Rico, Filmus, etc., quieren imponer las miserias neolibera­les que sostiene la CGT del fascista H.Moyano.
En este marco, los compañeros que firmamos esta declaración, llamamos a no apoyar las listas que abo­nan a la parálisis y/o destrucción de nuestro gremio, es decir, ni a los verdes ni a los kirchneristas. El voto crítico a la lista Bermellón lo ligamos a las luchas que venimos sosteniendo con algunos de los compañeros allí nucleados y con quienes compartimos la necesi­dad de una ATE al servicio de los trabajadores y el pueblo

Sobre la herramienta política

Quienes firmamos esta declaración, creemos que se puede y se debe construir la unidad en el Movi­miento Proyecto Sur al mismo tiempo que se disputa al interior la dirección de ATE. Este debería estar encolumnado por una dirección clasista y combati­va, al servicio de las necesidades de los trabajadores y no como la que reivindican los verdes y el PCR-CCC de nacionalismo burgués.

Sebastián Colman, Miguel Pinna
y Juan Valle, ATE - INTI